Durante medio siglo, Marisa Flórez ha sido testigo de la historia política de España a través del objetivo de su cámara. Desde la Transición hasta casi nuestros días, su archivo fotográfico tiene al Congreso de los Diputados como un escenario clave. Su mirada ha capturado rostros, gestos y momentos que ya forman parte de la memoria visual del país.
Ahora, muchas de estas fotografías, que nos permiten mirar la historia de nuestro país, recordar sucesos y descubrir nuevos enfoques, se pueden ver en la exposición Un tiempo para mirar (1970-2020), que se puede ver en Madrid hasta el 20 de julio.
En Fuera de Agenda hemos acompañado a Flórez en este recorrido por su obra, abordando su trayectoria y centrándonos en sus vivencias en el Congreso. “Esta exposición, para personas de cierta edad, son recuerdos. Recuerdos de momentos vividos que están expuestos. Para gente más joven, es descubrimiento”.
En concreto, “descubrir, quizá, pasajes o personajes poco conocidos para ellos que forman parte de su sociedad también. Es una forma de conocer la historia”.
La exposición comienza con la Transición, donde las fotografías retratan una sociedad con protagonistas del mundo del espectáculo, del arte, de la cultura y de la política que representan el principio de un cambio. “Era una forma nueva de mirar y de vivir”.
“Todos estábamos aprendiendo: la clase política, los periodistas… la sociedad en general. Eran nuevos comportamientos, nuevas formas que nos traían una forma diferente de ver la vida y de ver la sociedad en este momento, en el momento en que ocurrían los hechos”.
La vida en la Cámara Baja
Y, rápidamente, todos esos cambios sitúan al espectador en el Congreso. La Cámara Baja se convierte en un escenario central de la actualidad y, por lo tanto, de la obra de Flórez. Sesiones plenarias, comisiones, escenas en los pasillos, en la cafetería… La vida política ocupa las primeras páginas de los diarios, y Marisa Flórez es una de las personas que se encarga de documentar gráficamente los acontecimientos.
“En las tres primeras legislaturas, prácticamente, hacía la vida de un diputado, en el sentido de que íbamos muy pronto por la mañana allí y estábamos durante todo el día”.
Preguntada por cómo eran las jornadas en la Cámara, la fotoperiodista habla de preparación y suerte: “El día a día era estar con cámara preparada. Era conocer los temas del día, los personajes que podían intervenir… Pero luego surgen esas imágenes que ni tú te las esperas ni se las espera ninguno de los protagonistas”.
De hecho, nuestra protagonista enmarca su trabajo entre estos dos conceptos, porque un fotoperiodista “no llega y simplemente le da a un botón”. “Hay que estar atenta, hay que intentar estar en todos los sitios donde se pueda producir la noticia… Pero luego surge esa imagen que no tienes prevista, pero que está ahí, sucediendo. Y ahí es cuestión de, si tienes un poco de experiencia, intentar cogerla, pero otras veces la suerte también forma parte de todo esto y te ayuda a estar en el momento justo en el lugar adecuado”.
Flórez aplicó estos criterios a la hora de retratar la vida política, pero también la vida social y cultural de España. Por eso su obra atraviesa, de manera transversal, muchos de los momentos de actualidad de las últimas décadas de nuestra historia.

Marisa Flórez en la exposición «Un tiempo para mirar». (Imagen: Pablo Lorente).
Mirando el presente
La exposición termina en 2020, pero la actualidad sigue. Por ello, preguntamos qué fotografía le queda por hacer a Marisa Flórez. Qué haría Marisa Flórez si hoy volviera al Congreso de los Diputados con su cámara de fotos.
“Yo creo que haría lo mismo que hice en su momento: intentar contar lo que allí pasa, desde mi punto de vista, por supuesto, y transmitirlo al lector”. “Me encantaría volver para poder transmitir lo que ocurre allí”, remarca. “De otra manera, claro, porque es otro contexto y otros personajes, pero se trata de ir con ganas de transmitir lo que sucede. Una sociedad que no está informada le falta mucho para llegar a ser una sociedad realmente democrática, por lo tanto, yo estaría allí intentando hacer todo lo que pudiera y más”.
Cuando nos despedimos de Marisa, echamos un último vistazo, desde abajo, a las cuatro plantas que albergan la exposición, y buscamos, entre las 184 fotografías que la forman, la pared dedicada íntegramente al Congreso de los Diputados. “Es que lo que ocurre allí interesa. Creo que la política, por mucho que se piense lo contrario, es importante. En un país es importante la política y la forma de hacer política”.
La exposición
La exposición Un tiempo para mirar (1970-2020) se puede visitar en la Sala Canal de Isabel II de la Comunidad de Madrid hasta el 20 de julio. La muestra recorre la trayectoria creativa de la fotoperiodista Marisa Flórez (León, 1948) sobre los acontecimientos sociales y políticos de la historia reciente de España, desde la vida parlamentaria hasta las primeras manifestaciones o la llegada de El Guernica.
La trayectoria profesional de Marisa Flórez comienza en 1971, en el diario Informaciones, y continúa en El País, donde entre 1976 y 2012 ejerció como fotoperiodista, redactora jefa y editora gráfica. Ha sido galardonada con el Premio Nacional de Periodismo Gráfico (1981), el Premio de Fotografía Piedad Isla (2015) o el Premio de Cultura de la Comunidad de Madrid (2024), entre otros reconocimientos.