En los Parlamentos se han aprobado Constituciones, declaraciones de derechos, se ha declarado la guerra, se ha firmado la paz y se han aprobado importantísimas reformas sociales. Todo ello nos permite afirmar que el Parlamento es, probablemente, el espacio físico que más ha hecho por el avance de la libertad, al menos en los tres últimos siglos.

Este es el enfoque que predomina en “Momentos estelares del parlamento a lo largo de la Historia”, el libro editado por el Congreso de los Diputados y coordinado por Alfonso Cuenca Miranda, letrado de las Cortes Generales.

En la obra se repasan casi 40 episodios que, a modo de escenas, permiten al lector hacerse una composición del papel del Parlamento, “una institución sin la cual no podríamos entender el mundo de hoy, pero tampoco el de ayer”. Una institución por la que han pasado miles de hombres y mujeres para cumplir sus sueños y construir sociedades mejores.

Gracias a este libro, vamos a conocer mejor una institución en la que aquí se han adoptado las decisiones que han marcado la evolución de la humanidad en los últimos siglos.

De todos los episodios, Cuenca Miranda ha seleccionado cinco por su relevancia y singularidad que repasa en este “Nos lo cuenta”.

1. La Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano

"Juramento del Juego de Pelota". Jacques-Louis David.
«Juramento del Juego de Pelota». Jacques-Louis David.

Es un momento estelar del Parlamento en tanto que es el acontecimiento que que inaugura la Edad Contemporánea: la noche del 26 de agosto de 1789, en Francia, se aprueba lo que se puede considerar como una constitución mundial.

En la obra, el episodio está desarrollado por el letrado de las Cortes Generales Luis de la Peña Rodríguez. En el texto se destaca cómo esta Declaración marca el paso a de unas Cortes estamentales, propias del Antiguo Régimen, a unas Cortes verdaderamente representativas.

“Es la nación francesa la que, en uso de su soberanía, aprueba ese texto trascendental para los tiempos venideros”, resalta Cuenca, que pone el foco en dos artículos del texto: el artículo primero, que señala que “los hombres nacen y permanecen libres e iguales en derechos”; y el artículo decimosexto, que recoge que “una sociedad en la que no esté establecida la garantía de los Derechos ni determinada la separación de los poderes carece de Constitución”.

En lo que respecta a su tramitación, la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano se aprobó en “tiempo récord, apenas tres semanas”, pese a que se presentaron cientos de propuestas en diferentes comisiones que trabajaban de forma paralela a la Asamblea Constituyente francesa. “Los debates fueron apasionados y muy interesantes desde el punto de vista de la teoría constitucional con grandes oradores como Mirabeau o como Sieyès”, concluye Cuenca.

2. El debate sobre el presupuesto en la Cámara de los Comunes en 1852: un duelo bajo la tormenta

Este momento estelar sucedió en la madrugada del 17 de diciembre de 1852 en la Cámara de los Comunes del Parlamento británico. Esa noche se produjo “el primer encuentro estelar entre los dos grandes gigantes de la edad de oro del Parlamento británico”, Benjamin Disraeli y William Gladstone.

Cuenca Miranda repasa este episodio en el libro, donde narra cómo Disraeli, ministro de Hacienda, presenta el presupuesto ante la Cámara. Pero, en plena madrigada, William Gladstone pronuncia una alocución final que decantó la votación hacia el rechazo del presupuesto.

“Coincide, podemos decir, una tormenta meteorológica, que iluminaba la Cámara con sus relámpagos a altas horas de la madrugada; con una tormenta política a raíz de un debate presupuestario”. Un debate que provocó la caída del Gobierno conservador y un cambio de gran calado en la política del Reino Unido “por cuanto que los conservadores van a estar prácticamente tres décadas sin volver al poder y se va a afianzar lo que conocemos como el parlamentarismo liberal clásico decimonónico”.

Disraeli y Gladstone a mediados del siglo XIX

Además, el autor analiza la relevancia de estas dos figuras históricas: “A nivel político, son fundadores modernos de sus respectivos partidos. Disraeli es fundador del Partido Conservador o Tory en cuanto que él tiene, como principal objetivo, ampliar la base electoral de los conservadores. Gladstone, por su parte, es el artífice del triunfo y de la hegemonía del partido liberal en el siglo XIX”.

3. La tramitación de la ley Aldrich-Vreeland en el Senado de EE. UU.: “Alguien ha envenenado mi bebida”

Este episodio tuvo lugar el 29 de mayo de 1908 en el Senado estadounidense, durante el debate de la ley Aldrich-Vreeland: “Es un momento estelar por cuanto que marca el comienzo de la hegemonía del Senado en el sistema político norteamericano, algo que se va a dar hasta fechas muy recientes”, explica Cuenca, autor también de este capítulo.

Fotograma promocional de la película «El caballero sin espada».

“El episodio es muy ilustrativo porque también muestra un mecanismo muy peculiar del Senado norteamericano, el filibusterismo, que es una modalidad estadounidense del obstruccionismo parlamentario”. El autor explica cómo el obstruccionismo comenzó a decaer en las Cámaras desde principios del siglo XX, a través de reformas reglamentarias que limitaban los tiempos de uso de la palabra, en el Senado norteamericano todavía los senadores pueden hacer uso de la palabra ininterrumpidamente.

El protagonista de este episodio, el senador Robert La Follette, es un ejemplo de cómo el filibusterismo, “a pesar de tener una evidente mala prensa, también tiene aspectos no tan criticables, y fue a utilizado para emprender o conseguir la aprobación definitiva por parte de la Cámara Alta de reformas sociales”.

En este caso, el senador La Follette hizo uso de la palabra durante unas dieciocho horas seguidas, siendo relevado momentáneamente por algunos senadores que mantenían una posición similar a la suya. “En torno a las dos de la mañana, el senador pide un brebaje que solía pedir en la cafetería para mantenerse en plena forma mientras hacía uso de la palabra: un brebaje que estaba hecho a base de huevos y de leche”. “Al poco de dar el primer sorbo a ese brebaje se empieza a encontrar indispuesto y tiene que abandonar el estrado. No está muy claro si fue una intoxicación premeditada por parte de sus rivales políticos o si fue debido a que entonces el Senado carecía de un sistema de aire acondicionado y el calor echó a perder ese brebaje”.

Además, este senador inspiró, tres décadas más tarde, el personaje de Mr. Smith, que es el protagonista de la célebre película de Frank Capra “El caballero sin espada”.

4. El reconocimiento del Derecho al Voto de la mujer: Clara Campoamor y la lucha por los Derechos Femeninos

El siguiente momento estelar se produce el 1 de octubre de 1931, en las Cortes Constituyentes de la II República Española, cuando tiene lugar el debate parlamentario del reconocimiento del Derecho al Voto de la mujer.

El episodio está desarrollado por la letrada de las Cortes Generales Isabel María Abellán Matesanz, y se centra en la figura que protagonizó el debate: Clara Campoamor.

“Era una persona de orígenes muy muy humildes, que se convierte en la segunda mujer licenciada en derecho en nuestro país y que es la principal adalid del reconocimiento por primera vez en España del voto a las mujeres”, explica Cuenca. “Y todo ello ante la incomprensión de buena parte de sus correligionarios en esta Cámara (incluso de su propio partido), pero ella mantiene la posición frente a esas críticas.” Pese a ello, se consigue recoger por primera vez ese derecho del voto de las mujeres en la Constitución del año 1931”.

Revista Estampa (abril de 1932). Fuente: BNE.

En el capítulo se aborda también el papel que jugaron otras mujeres, como Margarita Nelken o Vitoria Kent, que también defendían el sufragio femenino, “pero la diferencia principal frente a estas dos figuras es que nuestra protagonista, Clara Campoamor, defendía la instauración del debate desde ese mismo momento. Otros partidos pretendían aplazarlo, pero Clara Campoamor señala la ineludibilidad histórica de reconocer ese sufragio femenino, y finalmente lo consigue, como digo, frente a la incomprensión y a la falta de reconocimiento, incluso posterior”.

5. La sesión constitutiva de las Cortes democráticas: el inicio de una legislatura que acabó siendo constituyente

Dolores Ibárruri, la Pasionaria, y Rafael Alberti bajan del brazo por las escaleras del Congreso. Fotografía: Marisa Flórez.

El último momento que abordamos en este repaso tuvo lugar el 10 de julio de 1977, día en el que se constituyeron las Cortes democráticas fruto de las elecciones del 15 de junio de ese mismo año.

El episodio está narrado por el letrado de las Cortes Generales Luis María Cazorla Prieto, quien destaca que “en los alrededores del Palacio de la Carrera de San Jerónimo se respiraba el aire especial e indefinible que suele caracterizar a las jornadas históricas o, al menos, muy singulares”.

Cuenca destaca que se trata de un momento estelar “por cuanto que verdaderamente inaugura el periodo democrático español del que actualmente disfrutamos”. “Supone, además, el encuentro y la reconciliación entre las dos Españas después de la Guerra Civil y de cuarenta años de dictadura”.

“Esa sesión es conocida por una célebre foto, en la que se ve a Dolores Ibárruri, la Pasionaria, y a Rafael Alberti bajando estas escaleras para tomar posición como vicepresidentes de la Junta Preparatoria, por cuanto que ambos eran los diputados que habían resultado electos de mayor edad”.

Cuenca relata, además, una curiosidad histórica que sucedió ese mismo día: a las diez de la mañana estaban convocados en el Palacio de las Carrera de San Jerónimo tanto los miembros del Congreso de los Diputados (que se constituyó en el Hemiciclo) como del Senado, una planta más arriba. “Todavía no estaba operativa la actual sede de la Cámara Alta en la plaza de la Marina Española”, y tanto diputados como senadores acudieron a la misma sede para que la actual democracia española continuara con sus primeros pasos.

“La labor que llevaron a cabo a lo largo de los siguientes meses es una labor asombrosa por cuanto que con unos medios muy alejados de los que hoy disponemos protagonizaron una auténtica revolución jurídico-política que nos propició la Constitución del año 1978 y una serie de normas, gracias a las cuales hemos podido vivir los españoles en paz y democracia en estos más de cuarenta años”.

Momentos estelares del Parlamento a lo largo de la Historia

La obra Momentos estelares del Parlamento a lo largo de la Historia está editada por la Dirección de Estudios, Análisis y Publicaciones del Congreso de los Diputados, y ha sido coordinada por Alfonso Cuenca Miranda. En ella se abordan un total de 39 episodios narrados por 38 autores.